Hace un par de días el periódico alemán Suddeutsche Zeitung reportó que hay un nuevo tipo de herramienta de búsqueda que la Oficina Federal Alemana de Investigación Criminal quisiera usar en el futuro. En vez de tener que seguir la tediosas formalidades de solicitar acceso a la casa del sospechoso y confiscar cualquier ordenador, se daría autorización a una agencia de seguridad para conectarse a distancia y monitoreas el equipo sospechoso.
Por supuesto, no se da ningún detalle sobre cómo se realizará la conexión. Tampoco se explica con exactitud cómo se obtendrá acceso a los datos. Pero los lectores asiduos de esta bitácora seguramente recordarán mi envío sobre su contraparte suiza: las autoridades de ese país escribieron spyware para seguirle la pista a los sospechosos. Sin embargo, no se dio ninguna información sobre cómo se instalaría este programa. Los dos posibles métodos pueden ser:
1. La instalación vía vulnerabilidades no parchadas.
2. Usando el clásico método de enviar el programa como un adjunto al correo electrónico y contar con que el usuario lo abra y ejecute.
Así que el artículo de Suddeutsche Zeitung no es el primero en informar que hay malware financiado por las autoridades y tenemos la certeza de que no será el último. Si asumimos que cada país relativamente importante está desarrollando (o usando) sus propios programas troyanos, sólo queda esperar a que alguien nos envíe una muestra de tales programas. Y quien sabe, quizá sea alguna de las muestras que ya tenemos sin saberlo. Después de todo, es muy probable que un troyano usado por las autoridades envíe los datos recogidos a un servidor policial fácil de identificar…
Hackeando en nombre de la ley