Un joven de Illinois, Estados Unidos, se ha declarado culpable de haber irrumpido en las redes de su escuela para comprobar si su rendimiento académico era satisfactorio.
Al principio, Jonah Greenthal, de 18 años, se había declarado inocente de un cargo menor de invasión de redes de ordenador, pero tras negociar con la fiscalía, aceptó declararse culpable para mitigar su sentencia.
El juez condenó al Greenthal a un año de supervisión y le ordenó que hiciera 50 horas de servicio comunitario y que pagara una multa de 320 dólares.
Además, el colegio expulsó al joven y le prohibió asistir a la fiesta de graduación de su curso.
Pero varios residentes de Glencoe, el condado donde vive el joven, han firmado un documento quejándose del fallo del juez, que consideran demasiado severo.
Greenthal admitió haber ingresado al sistema dos veces en febrero para comparar sus notas con las de sus compañeros de clase.
Una vez en el sistema, el joven ingresó a archivos confidenciales que contenían datos como las notas de los estudiantes y los salarios de los profesores.
La fiscal Jennifer Hamelly dijo que Greenthal había comentado con más de una docena de estudiantes lo que había hecho.
Además, cuando la fiscalía revisó su ordenador personal, encontró al menos 13 herramientas para cometer este tipo de ataques.
El joven pidió disculpas a la comunidad, la escuela y sus compañeros por sus acciones y aseguró que no había actuado con malicia.
El juez a cargo del caso, Earl Hoffenberg, dijo que consideraba lo que había hecho el muchacho como un crimen muy serio, semejante a robar una identidad.
Hacker se queda sin fiesta de graduación por irrumpir en el sistema de su escuela