Una corte estadounidense ha condenado a más de cuatro años de prisión a un ciudadano rumano acusado de realizar estafas por Internet. Esta es la primera vez que las autoridades de Estados Unidos sentencian a un extranjero por realizar este tipo de crímenes.
Ovidiu-Ionut Nicola-Roman es un ciudadano de Cracovia, Rumania. Lo arrestaron hace dos años en Bulgaria y fue extraditado para ser juzgado en los Estados Unidos. Allí se declaró culpable de un único cargo de conspiración para cometer fraude en junio del año pasado.
Según las autoridades, Nicola, de 23 años, formaba parte de un grupo de phishers que robó más de 1 millón de dólares a ciudadanos estadounidenses.
El método de ataque de este grupo consistía en enviar correos electrónicos a usuarios de Internet haciéndose pasar por funcionarios de algún banco o entidad financiera.
El mensaje advertía a sus víctimas que había surgido un problema con sus cuentas bancarias y les pedía que actualizaran sus datos personales y financieros en un sitio fraudulento.
Los delincuentes utilizaban los datos robados para clonar las tarjetas de crédito de sus víctimas y vaciar sus cuentas bancarias.
Los ataques se realizaron entre 2003 y 2007 y Nicola, que ahora tiene 23 años, comenzó a participar en estos actos criminales cuando tenía 18 años.
Nicola dijo que una de las motivaciones que tuvo para ganar dinero de forma ilícita fue ayudar a su madre enferma.
Asimismo, mientras esperaba su sentencia, el joven pidió a la corte que le diera poco tiempo en prisión para que pudiera estudiar en la universidad, formar una familia y alejarse del crimen.
Aún así, el juez a cargo del caso lo sentenció a 50 meses en prisión y tres años más de libertad condicional.
La fiscalía afirma que, más que causar un daño a algunos individuos, los ataques de Nicola perjudicaron a los Estados Unidos, cuyo sistema económico está basado, según la fiscalía, en la confianza que los ciudadanos tienen en sus entidades financieras.
Estados Unidos sentencia a 50 meses de prisión a un phisher rumano