Investigaciones publicadas por la agencia de noticias Bloomberg han revelado que la magnitud de los ataques de cibercriminales rusos a sistemas informáticos de los Estados Unidos vinculados con las elecciones presidenciales es mucho mayor de lo que la que se había establecido en los informes iniciales.
Las autoridades estadounidenses habían alertado que durante el periodo de campaña presidencial y los días previos a las elecciones en todo el país, hackers rusos habían filtrado mensajes de la cuenta de correo de Hillary Clinton, irrumpido en los sistemas informáticos de organizaciones que apoyaban su campaña y lanzado ataques cibernéticos que ponían al partido demócrata en desventaja y favorecían la elección de su contrincante republicano y actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Sin embargo, las investigaciones publicadas por Bloomberg indican que estos informes no contemplaban la gran extensión de los ataques de este grupo de hackers. Según los nuevos estudios, los sistemas de votación en 39 estados del país norteamericano recibieron ataques de hackers que operaban desde Rusia y buscaban el acceso a los sistemas de votos y el padrón electoral con los datos personales de más de 90.000 votantes.
Todavía queda la duda de qué pasó con los sistemas comprometidos: ¿por qué los atacantes rusos no los utilizaron para alterar los votos? ¿nNo sería ésa la finalidad más lógica para los ataques? Los expertos tienen varias teorías al respecto. Puede ser que las charlas entre la Casa Blanca y el Kremlin hayan dado resultado, o que simplemente los atacantes no hayan conseguido el acceso que necesitaban para burlar los sistemas de voto que se manejan a lo largo del país.
Esto no significa que los atacantes hayan conseguido ingresar a todos estos sistemas, pero sí demuestra que el ataque puede haber sido mucho más peligroso de lo que se creía inicialmente. La magnitud de la amenaza fue tan grande que la Casas Blanca se vio obligada a ponerse en contacto de forma directa y urgente con el Kremlin para ofrecerle documentos que comprueban la participación de Rusia en los ataques y advertirle sobre las repercusiones que esto podría tener en sus relaciones bilaterales.
Rusia ha negado cualquier vínculo con estos ataques, que son un atentado directo contra el proceso democrático del país. El presidente Vladimir Putin dijo en sus declaraciones que si bien existe la posibilidad de que los atacantes hayan actuado desde Rusia, esto no significa que lo hayan hecho al servicio del gobierno ruso.
Fuentes
Hackers rusos atacaron 39 sistemas electorales de EE.UU. antes de las elecciones presidenciales