El primer cracker sentenciado en España por desproteger un programa informático y distribuirlo en Internet pasará los próximos seis meses en prisión.
El pirata hizo un trato con la empresa Soft, cuyos productos había alterado y distribuido sin autorización, y aceptó declararse culpable de los cargos que se le imputaban.
Además, el cracker, identificado como R.A.G y que trabajaba usando el alias PPower, se comprometió a pagar una indemnización de 5.000 euros a la empresa Soft.
Todo empezó en 2003, cuando R.A.G. comenzó a alterar el programa “Presto”, utilizado para presupuestar proyectos de empresas constructoras.
R.A.G. modificó tres versiones del programa para anular sus sistemas anticopia y las distribuyó en Internet de forma gratuita e indiscriminada utilizando redes de intercambio de archivos (P2P).
Sin embargo, David Bravo, especializado en derecho informático y propiedad intelectual, opina que el medio utilizado para cometer el crimen no tiene importancia.
“Que la difusión se hiciera a través de redes P2P es intrascendente. Si lo hubiera difundido por correo postal o con una paloma mensajera el resultado habría sido el mismo”, dijo Bravo.
Las autoridades españolas arrestaron al cracker en junio de 2005, y la empresa Soft lo acusó de haber cometido un delito contra su propiedad intelectual.
Soft explicó que el programa que el pirata compartía en Internet a veces era de menor calidad que el original y cometía errores de cálculo, lo que dañaba la reputación de su empresa.
Asimismo, Soft aseguró que los actos de R.A.G. causaron un gran perjuicio económico a su empresa, pues los usuarios, en lugar de comprar su producto, lo descargaban gratis de Internet.
Pirata informático acepta cumplir seis meses de prisión en España