Shane Kelly, un adolescente británico de 16 años, se ha convertido en el hacker ético más joven del mundo. Kelly acaba de completar un curso para ser hacker ético que, por lo general, requiere que los alumnos sean mayores de 21 años.
Un hacker ético (o “sombrero blanco) es una persona que, en lugar de utilizar sus conocimientos de programación con propósitos dañinos, ataca las redes de una empresa para informarle cuales son sus fallas de seguridad y prevenir ataques de usuarios malintencionados.
Para ser un hacker ético es necesario pensar como un criminal virtual, como lo hacen algunos hackers malintencionados que son aún más jóvenes que Shane.
El certificado que Kelly recibió de la New Horizons Learning, en la ciudad de Birmingham del Reino Unido, demuestra que Shane conoce lo suficiente sobre ataques de usuarios malintencionados para proteger las empresas de este tipo de amenazas.
El muchacho se comenzó a interesar en los ordenadores cuando tenía alrededor de 10 años. Se refugió en el mundo virtual porque no tenía buenas relaciones con sus compañeros de colegio y porque se enteró de que era diabético.
Kelly atrajo la atención de expertos en tecnología. Rajive Kapoor, director de desarrollo empresarial de Security Systems Resource Internacional, felicitó a Kelly por usar sus habilidades para proteger las empresas.
Según Kapoor, cada año los criminales virtuales roban miles de millones de euros a las empresas, por lo que la labor de gente como Kelly es muy valorada.
Un Británico es el nuevo hacker ético más joven del mundo