Un reconocido spammer ha demostrado que sus crímenes no se limitan al mundo virtual: ahora espera una larga sentencia tras haber admitido que abusaba sexualmente de menores de edad en una habitación especial construida en el sótano de su oficina.
Leonid Kuvayev, de nacionalidad rusa y estadounidense, a veces trabajaba con spammers famosos como Alan Ralsky, Ruslan Ibragimov y Michael Lindsay, entre otros. Kuvayev, conocido en Internet como “BadCow”, ya había tenido problemas con la ley: en 2005, una corte le ordenó que pagara una multa de 37 millones de dólares por propagar correos spam que ofrecían medicamentos, programas pirateados y todo tipo de pornografía.
“El atacante ya estaba en la mira de los detectives”, dijo un portavoz del ministerio del interior de los Estados Unidos. “Después de emigrar a los Estados Unidos hace diez años, comenzó a crear sitios fraudulentos y sitios de lavado de dinero, a vender programas para un casino virtual y tarjetas de identificación bancarias falsas”.
Esta vez, las autoridades descubrieron que Kuvayev atacaba sexualmente a menores de edad de entre 13 y 16 años, muchas de las cuales tenían problemas mentales y vivían en orfanatos. El criminal llevaba a sus víctimas a su oficina, donde tenía escondido un cuarto especial en el sótano para cometer los crímenes.
“Oficiales de la policía revisaron la oficina del criminal, que utilizaba para su negocio de bienes raíces. Descubrieron una habitación con una ducha, sauna, jacuzzi y una cama muy grande”, dice el informe de la policía. Kuvayev admitió su culpa, pero asegura que tenía el consentimiento de los menores.
Diez de las víctimas han presentado demandas contra el spammer. Kuvayev podría recibir una sentencia de hasta 20 años de prisión por cada una de las víctimas, así que podría pasar el resto de su vida tras las rejas.
Fuentes:
Notorious Russian spammer ‘admits child abuse’ The Register
Facebook Video Scam Puts Malware on Mac and Windows PC World
Spam king faces jail after admitting child sex charges Nakd Security
Un spammer podría pasar su vida en prisión por abuso de menores